Shein, la tienda en línea de ropa barata que cautiva al público joven que desea ahorrar y estar a la moda

La popularidad de Shein y su moda «ultra rápida» ha explotado durante la pandemia. Con ventas que superaron los US$10.000 millones en 2020, según la consultora CB Insights, la presencia en el segmento juvenil se afianza cada vez más a través de influencers y una fuerte estrategia de marketing digital.

Richard Lim, director ejecutivo de la consultora independiente Retail Economics, dice que la crisis de la pandemia proporcionó un impulso a las ventas de la empresa, reseñó BBC Mundo.

«Los confinamientos significaron que muchos consumidores pasaban más tiempo navegando en línea», afirmó.

«Esto ayudó a la tienda en línea a aumentar su presencia y llegar más rápidamente a una audiencia más amplia», agregó.

La historia breve detrás de la marca

Los poco conocidos fundadores de Sheinside (el nombre original) se unieron en 2008, liderados por el empresario Chris Xu, quien comenzó en marketing digital y vendía vestidos de novia en línea.

La forma breve de su nombre actual, Shein, la adoptó unos cinco años más tarde.

Costos promedios

Aunque tiene su sede en China, la empresa apunta fundamentalmente a clientes en Estados Unidos, Europa y Australia, con sus tops cortos, bikinis y vestidos, que cuestan unos US$10,70 en promedio.

En la actualidad es uno de los grandes jugadores en el campo de la moda rápida y coloca sus productos en 220 países.

Oferta amplia

En un momento cualquiera, Shein tiene en venta hasta 600.000 productos en su plataforma en internet.

Para ello se apoya en miles de proveedores externos, así como en unos 200 fabricantes contratados, cerca de su sede en Cantón.

Usando lo que Matthew Brennan, autor experto en tecnología y en China, ha bautizado como «comercio minorista en tiempo real», empresas más pequeñas junto a su cadena de suministro reciben información desde unas plataformas propias de la empresa acerca de cuáles son las tendencias y cuán bien le está yendo a ciertos productos.

En base a esos datos, producen un lote de entre 50 y 100 productos por modelo. Si les va bien, Shein ordena más. De lo contrario, son descontinuados.

Cortesía

Shein puede crear un nuevo producto en unos 25 días. Para muchas tiendas minoristas, eso puede requerir meses.

Ellos han acelerado el modelo de «prueba y repite», usado por empresas reconocidas como H&M e Inditex, propietario de Zara.

Según ha sabido la BBC, apenas el 6% de la producción de Shein permanece en stock más de 90 días.

La empresa realiza los envíos directamente desde su sede en Cantón, pero sus paquetes tardan al menos una semana en llegar a mercados como Reino Unido y Estados Unidos, mientras que algunos de sus competidores como Boohoo, OhPolly y Asos ofrecen entregas al día siguiente.

Más de 250 millones de seguidores

Usando a un ejército de influencers, desde estudiantes que sirven de «embajadores en las universidades» hasta estrellas de reality shows, Shein ha logrado sumar más de 250 millones de seguidores en sus cuentas en redes sociales.

Dirigir bien sus anuncios hacia los públicos clave y apoyarse en influencers en Instagram y TikTok le ha ayudado a mantenerse relevante entre los compradores más jóvenes.

Esos esfuerzos han sido impulsados por el hecho de que con frecuencia organiza programas en directo en sus plataformas digitales para promover sus productos.

«Esto es más característico de Shein, dado que las transmisiones en directo son menos usadas por las marcas occidentales, pero tiene un enorme potencial para impulsar las ventas, como se ha visto en China», explica Emily Salter, analista de comercio minorista de GlobalData.