Desde 2018 la administración de Nicolás Maduro ha emitido diversos decretos para manejar, a su antojo, el control de la recolección y exportación de los materiales ferrosos.
Han calificado a estos productos como de “carácter estratégico y vital para el desarrollo de la industria nacional”.
A su vez , se obliga a que toda la chatarra que se produce en el país sea vendida de forma exclusiva al gobierno, dando potestad a las gobernaciones y alcaldías para que recolección y posterior comercialización.
Economía negra como oxigeno
Luego, en 2019, comenzaron las sanciones de EE.UU. contra el gobierno madurista y sus representantes; situación que limita la actividad económica del Estado venezolano.
Ante esa realidad, el economista Asdrúbal Oliveros puntualizó que la llamada «economía negra» ha sido la estrategia utilizada por el madurismo como «oxígeno» al régimen para enfrentar las sanciones.
«Las sanciones exacerbaron esa economía en negro, porque funcionó como mecanismo de sobrevivencia y, además, permitió, en buena medida, neutralizar el efecto de las mismas».
Materiales estratégicos en la mira
Oliveros detalla que en esos «negocios» se maneja todo lo relacionado a materiales estratégicos como el oro, coltán, y un sin fin de metales.
“De los 8.000 millones que recibirá el Estado en 2021 (producto de las exportaciones), 5.000 vienen del petróleo y el resto comprende la venta de oro y de chatarra, que se ha acelerado”.
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Desmantelamiento
Según la investigación liderada por Tal Cual y Conectas, en 2020, se desmontaron dos líneas de Aluminios del Caroní (Alcasa), con capacidad de producción de 170.000 toneladas anuales.
“Eso podría servir para reparar colegios, hospitales y carreteras en Venezuela. Se generó más de 20.000 toneladas de chatarra que la están vendiendo para satisfacer algunos bolsillos y desfavorecer a los trabajadores”, afirmó Henry Arias, representante sindical de la empresa.
Pero en 2021 les tocó el turno a otras dos empresas: Sidor y Venalum.
“El zarpazo (golpe) empezó el 24 de mayo. Están desarmando la acería, una acería que tenía un proyecto de ampliación, pero después dijeron que era muy costoso. Esa planta la están destruyendo. Chatarreándola”, dijo Carlos Rosas, con una antigüedad laboral de 33 años en Sidor.
Contrabando de Coltán
El coltán, incautado en Colombia, está siendo traficado por grupos armados que tienen vínculos con minas ilegales en Venezuela, señaló una investigación de InSight Crime.
En marzo de 2021, las fuerzas de seguridad colombianas descubrieron alrededor de cinco toneladas de coltán ocultas entre bultos de arena en una embarcación que navegaba por el río Guaviare, en el departamento de Guainía, en el este del país y fronterizo con Venezuela.
Negocios de las FARC y ELN
Las autoridades afirman que el coltán había sido contrabandeado por el Frente Acacio Medina, grupo disidente de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC).
Más tarde, en julio, se encontraron otras 1,2 toneladas de coltán en el departamento de Vichada, también en la frontera con Venezuela.
Según la Fiscalía General de la Nación colombiana, la carga estaba valorada en US$130.000 y supuestamente pertenecía al Ejército de Liberación Nacional (ELN), el último grupo guerrillero que permanece en pie en Colombia.
¿Exportación legal o ilegal?
La primera exportación legal de coltán de Venezuela se realizó en 2018, en un cargamento de cinco toneladas enviado a Italia y valorado en 350.000 dólares.
Sin embargo, las sanciones económicas impuestas por Estados Unidos en 2019 pusieron fin a gran parte de las exportaciones legales de minerales de Venezuela.
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Ese año, las autoridades italianas incautaron coltán venezolano que había llegado al puerto de Trieste proveniente del puerto de Cartagena, Colombia.
Italia se retira preocupada
Por su parte, la Cámara de Diputados de Italia, indicó que estaban preocupados por los informes que señalaban al “gobierno venezolano quiere enriquecerse con el tráfico de coltán” y que la persona a cargo del comercio era Nicolás Maduro Guerra, hijo de Nicolás Maduro.
Maduro Guerra fue sancionado por EE.UU. en 2019, acusado de corrupción, y es sospechoso de estar involucrado en el comercio ilegal de oro del país.
El informe del gobierno italiano también menciona las afirmaciones del diputado opositor venezolano Américo de Grazia, según las cuales el coltán fue extraído ilegalmente.
Llamado a la investigación
El diputado, Omar González, solicitó ante la Comisión Delegada se abra una investigación exhaustiva para poner fin a la venta de Venezuela como chatarra.
La información la dio a conocer el parlamentario este martes en la Comisión Delegada de la Asamblea Nacional, llevada a cabo vía remota, a propósito de conocerse el desmantelamiento de la Fragata Almirante García F-26 de la Armada Bolivariana que fue comprada por Venezuela en el año 1982 y está siendo vendida como chatarra.
“Desde hace tres años los puertos en Venezuela se han venido convirtiendo en depósitos de chatarra, donde se pueden observar montañas inmensas de hierro y aluminio”.
González indicó que en el año 2020 el régimen desmanteló las líneas de Aluminio del Caroní (Alcasa), empresa que tenía una capacidad de producción de más de ciento setenta mil toneladas anuales.
“Esto ha generado para los chatarreros más de veinte mil toneladas de chatarra”.
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