Tribunal peruano ordena la excarcelación del expresidente Alberto Fujimori

La Corte Constitucional de Perú aprobó un «habeas corpus» interpuesto por los abogados del expresidente Alberto Fujimori, con el cual podría salir de prisión esta semana.

En un comunicado, la Corte dijo que los magistrados en el Pleno votaron el Expediente N° 02010-2020-PHC/TC, un proceso de habeas corpus promovido a favor de Alberto Fujimori contra la decisión del Presidente de la Magistratura y otros.

Los jueces Ernesto Blume, José Luis Sardón y Augusto Ferrero votaron a favor del recurso de indulto de Fujimori. En este caso, dicho recurso fue interpuesto por Gregorio Parco Alarcón en contra de la decisión de la Corte Suprema de Justicia que anuló el indulto humanitario.

«Una lamentable decisión para los peruanos por el caso de Alberto Fujimori»

Pedro Pablo Kuczynski, en 2017, concedió el indulto a Fujimori por razones humanitarias. Sin embargo, el Poder Judicial anuló este beneficio. Ante esta sentencia, Carlos Rivera, abogado de las víctimas de las masacres de Barrios Altos y La Cantuta; calificó de lamentable la decisión de la Corte Constitucional.

Fujimori ha estado cumpliendo una condena de 25 años por violaciones de derechos humanos durante su mandato de 1990 a 2000; incluidas las masacres en Barrios Altos (1991) y La Cantuta (1992).

El presidente peruano, Pedro Castillo, criticó la decisión de la corte y tuiteó que «la crisis institucional» de la que habló en un mensaje al Congreso el martes se refleja en la última decisión de la corte.

El registro de las votaciones será publicado en la página web de la institución y será notificado oportunamente. Fujimori actualmente cumple condena en el Penal de Barbadillo.
Ahora Fujimori, de 83 años, podrá salir de la cárcel, ubicado en el distrito limeño de Ate; donde cumplía una condena de 25 años de prisión por crímenes de lesa humanidad.

El expresidente peruano fue acusado de ordenar a un escuadrón de la muerte conocido como Grupo Colina que cometiera las dos masacres. También fue condenado por su participación en los secuestros del periodista Gustavo Gorriti y del empresario Samuel Dyer, ambos en 1992.