Rusia confirma por primera vez el uso de un misil hipersónico en Ucrania

Tras 23 días desde el comienzo de la invasión rusa a Ucrania. Por primera vez, según el Ministerio de Defensa ruso, confirman el empleo de un misil hipersónico «kinzhal» (Daga) para atacar un arsenal subterráneo ucraniano en el suroeste del país.

Igor Konashenkov, portavoz del Ministerio, confirmó el impacto del misil en la localidad de Deliatyn, en el que resultaron destruidas cajas de municiones para aviones de combate, según el ente ruso.

La ciudad de Deliatyn se encuentra en las afueras de la ciudad de Ivano-Frankivsk, junto a la frontera con Rumanía.

Por su parte, la agencia estatal de noticias RIA Novosti, indicó que esta es la primera vez que se usa este tipo de armas desde el inicio del conflicto.  También, recordó que Rusia jamás había reconocido el uso de este misil de alta precisión en combate.

«Un arma ideal»

Mientras tanto, el mandatario ruso, Vladimir Putin, indicó que el misil Kinzhal es «un arma ideal». Pues puede superar los sistemas de defensa aéreos ucranianos, debido a que puede trasladarse 10 veces la velocidad del sonido.

Esta nuevo armamento se conoció por primera vez en 2018, luego de un discurso de Putin sobre el estado de la nación. Estos misiles hipersónicos, al igual que los misiles balísticos tradicionales pueden transportar armas nucleares. Y pueden volar a más de cinco veces la velocidad del sonido.

Preocupación de Occidente

Naciones como los Estados Unidos también han desarrollado sistemas para defenderse de este tipo de tecnologías, con la capacidad de rastrear y derribar un misil hipersónico, pero sigue siendo una incógnita.

Washington expresó su preocupación por los esfuerzos de China y Rusia para desarrollar este tipo de tecnología, afirmando que podría aumentar las tensiones en el Indo-Pacífico.

EE.UU, China, Rusia y al menos otros cinco países han estado trabajando en la tecnología hipersónica. Pero China y Rusia, a diferencia de los Estados Unidos, se han centrado en el desarrollo de misiles hipersónicos compatibles con armas nucleares, según el Servicio de Investigación del Congreso.