Periodistas rusos renuncian como protesta ante invasión a Ucrania

Las noticias rusas continúan restando importancia a la invasión en Ucrania y algunos de los periodistas rusos renuncian como protesta.

La presentadora de NTV, Lilia Gildeyeva, anunció el martes que dejaría el canal y abandonaría el país.
Ella comentó que se fue de Rusia antes de presentar su renuncia por temor a que no se le permitiera irse de otra manera.

Mientras tanto, la editora en jefe de Russia Today (RT), Maria Baronova, renunció en señal de rechazo a la guerra. Los reporteros extranjeros que trabajan para RT también renunciaron en protesta, incluida la corresponsal en Londres, Shadia Edwards-Dashti, el presentador francés Frédéric Taddeï y Jonny Tickle, quien reside en Moscú.

Mientras tanto, el presentador del programa de entrevistas, Ivan Urgant, se tomó un descanso de su programa después de publicar un mensaje contra la guerra en Instagram.

La creciente oposición en el país por su guerra en curso contra Ucrania se ha producido incluso cuando Vladimir Putin ha intentado sofocar la oposición con la promulgación de una ley para castigar a cualquiera que difunda lo que considere «noticias falsas» sobre su invasión a Ucrania.

Periodistas rusos renuncian

El caso de Marina Ovsyannikova, la periodista que irrumpió en el noticiero central ruso, fue detenida luego de que corriera al plató con un cartel que decía «no a la guerra». Le impusieron una multa de 30.000 rublos por el hecho.

«No le tengan miedo a nada. No nos pueden encarcelar a todos», dijo luego de 14 horas de interrogatorio sobre el supuesto «acto no autorizado».

Las imágenes de la protesta de la Ovsyannikova se compartieron rápidamente en todo el mundo después de que corriera al set de uno de los programas de noticias más vistos de Rusia, Vremya. Antes del incidente grabó un video en el que decía que le daba vergüenza trabajar para lo que llamó propaganda del Kremlin.

Se han censurado medios de comunicación rusos en los últimos días

Desde que comenzó la invasión rusa a Ucrania hace dos semanas, Rusia se ha aislado cada vez más del resto del mundo de varias maneras importantes. Incluido el acceso a los medios internacionales y al Internet global.

En algunos casos, la propia Rusia ha estado cortando esos lazos, como lo hizo recientemente cuando prohibió Facebook, porque la empresa se negó a dejar de verificar los hechos en los medios de Rusia como Russia Today y Sputnik.

Según los informes, Twitter también ha sido parcialmente bloqueado en el país. Hasta ahora, los ciudadanos rusos aún pueden usar WhatsApp e Instagram. En otros casos, las empresas han retirado voluntariamente sus servicios. YouTube ha prohibido RT y Sputnik, al igual que toda la Unión Europea.

TikTok dijo hace una semana que aunque todavía está disponible en Rusia, ya no permitirá a los usuarios transmitir en vivo o subir videos desde ese país. Debido en parte a una avalancha de desinformación y a la llegada de una nueva ley de «noticias falsas» en Rusia que conlleva penas severas para aquellos que se encuentran en violación.

El presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, le agradeció en uno de sus discursos e instó a todas las personas que piensan que están trabajando para el “sistema de propaganda de Rusia” a que renuncian.