Oligarca ruso Roman Abramovich y dos negociadores ucranianos habrían sido envenenados según WSJ

Roman Abramovich, multimillonario ruso y dos negociadores ucranianos, habrían resultado envenenados tras reuniones de ambas partes. Los afectados forman parte de un equipo que busca conseguir un acuerdo de paz para poner fin a la invasión rusa en Ucrania. Así lo habría revelado el diario estadounidense, Wall Street Journal (WSJ).

Síntomas comunes

Diversos portales europeos han detallado que Abramovich y los negociadores comenzaron a sufrir síntomas de un presunto envenenamiento tras una reunión en Kiev a comienzo de marzo según los datos que maneja el WSJ.

Abramovich

y los otros miembros fueron afectados por una molesta irritación en los ojos, lagrimeo constante y doloroso y descarnación de la piel de la cara y las manos. Estos síntomas son comunes en otros casos donde hubo envenenamiento.

Sobre la autoría del hecho

El WSJ sospecha que se trate de radicales rusos que se oponen a un fin de la invasión rusa. Sin embargo, tras los hechos, el rotativo afirma que los afectados están fuera de peligro y su salud evoluciona positivamente.

Abramovich se encuentra en un proceso de negociación con el parlamentario tártaro-crimeo Rustem Umerov y otro diplomático ucraniano. El oligarca ruso, a pesar de estar sancionado por occidente; sigue trabajando y en funciones de negociador según datos de agencias internacionales.

Abramovich estuvo movilizándose entre las ciudades de Leópolis, Moscú y otras como parte de sus esfuerzos de mediación entre Rusia y Ucrania. Aunque él se reunió con el presidente Volodimir Zelenski, este no resultó afectado según informó su portavoz, citado por el WSJ. Por su parte, el Kremlin reconoció que Abramovich “jugó un rol inicial en las conversaciones; pero el proceso ahora es manejado por las partes negociadoras”.

WSJ afirma que las sospechas del ataque recaen en «elementos radicales de Moscú”

que intentan boicotear las negociaciones de paz. También precisó que las informaciones apuntan a que es difícil determinar si el supuesto envenenamiento lo causó un agente químico, biológico o si se trató de una radiación electromagnética.