Mafias de Trata de Personas buscan aprovecharse de migrantes ucranianos
Cifras alarmantes. Más de tres millones de ucranianos han huido de su país tras la invasión rusa, hace más de cinco semanas. La Organización Internacional para las Migraciones y diversas ONG han denunciado como viene creciendo una red de trata de personas que persigue el desamparo de civiles que huyen de Ucrania.
Se ha contabilizado 1,4 millones son niños, según la Unicef, y también hay 157 mil ciudadanos de otros países que huyeron de la nación productora de trigo y cereales.
ONU verificó al menos 36 casos de detenciones de civiles
Según la ONU, cientos de ucranianos son detenidos arbitrariamente y sometidos a desapariciones forzadas en áreas controladas por Rusia. Incluso en varios casos se les negó cualquier información sobre el destino de los detenidos a las familias.
Campaña de odio
Los residentes ucranianos temen ante la creciente campaña aparentemente impulsada por Rusia, que busca promover los secuestros e intimidación, mientras en paralelo toman el control de las ciudades.
Por el momento, en la nación atacada bajo bombardeos constante, sin escuelas ni atención médica se encuentra la mayoría de las ciudades rodeadas por los rusos.
Principalmente mujeres y niños, son los que buscan refugio en otras zonas del país, que se cree que son más seguras. Pero más de tres millones y medio de personas han huido por la frontera.
Mientras que a los hombres menores de 60 años, el gobierno les obliga a quedarse en el país y luchar por la soberanía de su territorio.
Desplazados y desorientados, a menudo sin saber a dónde ir, los refugiados se ven obligados a confiar en extraños.
“Para los depredadores y traficantes de personas, la guerra en Ucrania no es una tragedia”, advirtió en Twitter el secretario general de la ONU, Antonio Guterres. “Es una oportunidad, y las mujeres y los niños son los objetivos”.
El riesgo de los niños
Las redes de tráfico están activas en Ucrania y los países vecinos. Y ahora la niebla de la guerra es la tapadera perfecta para incrementar el negocio.
Coordinadora de Homo Faber, Karolina Wierzbińska, una organización de DDHH con sede en Lublin, Polonia, dijo que los menores eran la gran preocupación. Muchos viajaban fuera de Ucrania sin compañía, explicó.
Varios niños desaparecieron y se desconoce su paradero actual como resultado de unos procesos de registro irregulares en Polonia y otras regiones fronterizas, especialmente al comienzo de la guerra.