|

Expresidenta boliviana Jeanine Añez intentó suicidarse

La expresidenta boliviana, Jeanine Añez el miércoles fue trasladada a un hospital desde la cárcel, su tercer viaje al hospital en dos semanas. La visita al hospital del miércoles «no fue coordinada con la familia ni con los abogados», dijo Luis Guillén, otro abogado que representa a Añez.

«De una manera abrupta y repentina, la sacaron hoy de la cárcel… y la llevaron a este hospital sin que sepamos nada de los motivos» detalló Guillen.

Los médicos dijeron que le hicieron un examen de tórax y que sufre de hipertensión. Desde entonces ha regresado a la cárcel. Uno de los abogados que representa a Añez, Norka Cuellar, dijo a los periodistas que el estado de la ex dirigente era «grave», sin dar más detalles.

Sin embargo, hoy el ministro de Gobernación, Eduardo Del Castillo, dijo que Añez  informó había sufrido lesiones en el brazo, pero que «está estable». Cabe destacar que este viernes fue acusada de genocidio por el Gobierno Boliviano.

Dijo que la expresidenta Jeanine Añez, quien se encuentra detenida preventivamente en el Centro Penitenciario Femenino de Miraflores, se lesionó durante la madrugada de este sábado, pero aseguró que las heridas son «rasguños superficiales en su brazo y que su salud no corre riesgo».

«Lamento informar que la señora Jeanine Añez habría intentado generarse una autolesión en la madrugada de hoy, sin embargo manifestamos que su salud se encuentra totalmente estable. Tiene algunos pequeños rasguños en uno de sus brazos, sin embargo no hay nada de que preocuparse», dijo Del Castillo en conferencia de prensa.

¿Cuándo fue detenida Añez?

Añez fue detenida a principios de este año por las acusaciones de que participó en un golpe de estado para derrocar  Evo Morales en 2019. Ella niega las acusaciones y dice que es víctima de una persecución política. Está detenida en la cárcel mientras espera el juicio.

La Fiscalía presentó el viernes una acusación formal contra Áñez «por hechos calificados provisionalmente como genocidio, lesiones graves y lesiones seguidas de muerte», por las masacres de Senkata y Sacaba, ocurridas en medio de la revuelta que obligó al entonces presidente Evo Morales a abandonar el país y denunciar un golpe de Estado, en noviembre de 2019.

Bolivia está ahora gobernada por el presidente socialista Luis Arce, que pertenece al partido de Morales. Desde que fue encarcelada, Añez ha sufrido varios sustos de salud, y los médicos han dicho que tiene hipertensión y algunos problemas de salud mental.

La semana pasada, Añez fue llevada dos veces a un hospital cercano a donde está detenida en La Paz. El miércoles, fue llevada a otro centro en la cercana ciudad de El Alto.

¿Por qué abandonó el interinato?

El arresto de Añez se deriva de los acontecimientos que tuvieron lugar a partir de octubre de 2019, cuando el líder izquierdista Morales se postuló para un cuarto mandato en el cargo, desafiando los límites de mandato de la nación.

Morales, fue un líder ampliamente popular durante sus casi 14 años en el cargo. Sin embargo, su popularidad ha disminuido debido a las acusaciones de mala gestión y a su negativa a abandonar el poder.

Después de los resultados de las elecciones presidenciales, que Morales dijo haber ganado, se vieron salpicados por acusaciones de fraude electoral, lo que desencadenó semanas de protestas en todo el país. Tras la presión de las fuerzas armadas, que retiraron su apoyo al gobierno, Morales anunció su dimisión en noviembre de 2019. Luego huyó del país, primero a México y luego a Argentina.

Más de 30 partidarios de Morales fueron asesinados durante las protestas tras su renuncia. La destitución de Morales también provocó la renuncia de otros que  despejaron el camino para que Añez, una senadora poco conocida hasta entonces, asumiera la presidencia.

Aunque se esperaba que ocupara el puesto de presidenta interina y se le encargara principalmente la repetición de las elecciones presidenciales y legislativas, Añez comenzó a deshacer el legado de Morales y a detener a sus partidarios por lo que se consideró ampliamente como razones políticas.

Durante su primer año como presidenta interina, la administración de Añez fue acusada de corrupción, mal manejo de la pandemia de coronavirus y de imponer un gobierno cada vez más autoritario. En septiembre retiró su candidatura a la presidencia.