Desnutrido y un caso en “olvido legal”: lo que vive el primer teniente Carlos Eduardo León Nunes
“Hoy está de cumpleaños. Otro cumpleaños más injustamente encerrado por está dictadura”, dijo el 21 de febrero, Lismelys Lozada Nunes, hermana de primer teniente de la Aviación Carlos Eduardo León Nunes, preso político de la Administración de Nicolás Maduro desde el 30 de abril de 2019.
León Nunes cumplió 37 años de vida esta semana, de ellos tres años los ha pasado encarcelado por estar en desacuerdo a las políticas de Maduro y haberse alzado en armas el recordado 30A. Sí, aquel día en el que el político Leopoldo López se fugó del arresto domiciliario y Juan Guaidó anunció la “Operación Liberad”.
Mientras en Caracas transcurrían hechos militares y civiles frente a la base aérea La Carlota; en Maracay, estado Aragua, también había un alzamiento en armas. En este último caso, en la Compañía Anónima Venezolana de Industrias Militares (CAVIM).
Militares liderados por el mayor de Aviación, Andry Federico Carrizalez, por lo menos tres primeros tenientes, entre ellos León Nunes, y un sargento de la Aviación, intentaron tomar CAVIM.
En un presunto enfrentamiento entre alzados y el personal de guardia, resultó herido Carrizalez en un ojo; lo trasladaron al Hospital Militar “Elbano Paredes Vivas”, situado en Maracay.
Se habría rendido
Tras resultar lesionado el líder de la operación militar, León se habría entregado y el resto de los alzados se dio a la fuga. A partir de ese momento comenzó el horror para el primer teniente de la Aviación e ingeniero en Mantenimiento Mecánico.
Torturado por la DGCIM
Según sus familiares, desde el momento de su rendición estuvo bajo custodia de la DGCIM en Maracay, donde sufrió terribles torturas.
“Mientras lo tuvieron detenido en los tribunales militares de Maracay sufrió torturas por funcionarios del DGCIM. Los metían es un cuarto con aire acondicionado lo más frío, les echaban agua fría y les ponían electricidad. También sufrió maltrato psicológico”, contó Lozada a Cima360news.
Pasar hambre en Ramo Verde
Lo trasladaron a Ramo Verde el 3 de mayo del 2019, desde entonces diversas condiciones del lugar y a la crisis país han afectado su salud.
Según una estimación de sus familiares, perdió “más 20 kilos” y su peso actual habla de una “desnutrición”. “Está demasiado flaco, la última vez que lo vi lo abrazaba con un solo brazo”, dijo su hermana.
Añadieron los familiares: “Ha pasado hambre ya que el alimento que les proporcionan allá no es suficiente, es como para que ellos medio vivan. Y a nosotros, la familia, se nos ha hecho bastante difícil trasladarnos hasta Ramo Verde y llevarle comida por la misma situación del país”.
Su familia no cuenta con los recursos económicos para visitarlo regularmente. La última vez que pudieron viajar desde Aragua a verlo fue en septiembre de 2021; desde entonces, tratan de hacer lo posible para enviarle alimentos con algún familiar de sus compañeros de celda.
En dicho centro de reclusión militar ubicado en Los Teques, estado Miranda, el suministro de agua falla. Por esa situación el primer teniente León ha presentado “dolores de estómago, diarreas y gastritis”
“No tiene agua potable. Muchas veces tiene que esperar más de 15 días para que les llegue el agua potable”, contó la hermana a Cima360news.
Un caso “en el olvido”
Al primer teniente e ingeniero le imputan los cargos: Traición a la Patria, Instigación a la rebelión, Motín, Uso indebido de las armas, Sustracción, Contra el decoro militar y Desobediencia.
Su caso está en el Tribunal Militar Quinto de Control en Maracay estado Aragua, lugar al que no lo trasladan desde septiembre 2019, según denuncia la familia de León.
En un primer momento el caso lo llevaba una abogada militar, la capitana Josmary de Jesús Aguilera. Sin embargo, en vista de no ver avances ni tener acceso a conocer la situación legal del preso político, la familia acudió a la ONG Foro Penal para solicitar ayuda.
“Cada vez que el abogado va le ponen excusas. No lo han querido atender, no han querido juramentarlo para darle el caso de mi hermano y que pueda acceder al expediente. A nosotros nunca nos dieron copia. No lo llevaban a tribunales desde septiembre de 2019, lo tienen allá, en el olvido”, denunció la familiar.
Asimismo, en los últimos días, a través de los familiares se trató de establecer contacto con el abogado asignado por el Foro Penal pero no se logró.
El clamor de sus seres queridos
Que el caso no sea engavetado y que pronto puedan ver en libertad a Carlos Eduardo León Nunes anhela su familia. Volver a celebrar su cumpleaños en familia y que él “sea el alma de la fiesta” sueña su hermana.
Ella lo recuerda como un hombre muy profesional que aunque trabajaba mucho siempre hacía reír a la familia y solía compartir cada cumpleaños con los suyos.