Cota 905: «La policía me revisa hasta la bolsa de comida que llevo»

Testimonios después de una guerra campal entre funcionarios y antisociales, un terror que ha dejado a la capital, sumergida en cifras de abatidos; abusos a la autoridad, Estado fallido y una comunidad de personas aterradas en la Cota 905.

Después de aquel 7 de julio.

Nada volvió hacer lo mismo para las barriadas que rodean el oeste de Caracas, pues no solo es un tema delicuencial con bandas armadas, es también un tema de abusos de poder por parte de funcionarios del Estado, que estarían detrás de uno de los operativos más importantes que ha vivido Venezuela en la última década.

3100 funcionarios han sido parte de esta cacería delincuencial, pero también parte de ellos son hoy denunciados entre voces, pues quien cuenta lo que ocurre en la Cota 905, teme por ser víctima tras sus testimonios y lo que pasa en estas zonas rojas.

Auxiliadora es una señora que vive en la Cota 905, y que le ha tocado vivir «acoso policial», según ella, estaban mejor cuando el líder de las bandas de este sector «El Koki» estaba en el barrio:

«Sé que El Koki no era un santo, pero aquí jamás vivimos esto, ahora no puedo salir de mi casa, no puedo ir a trabajar, porque se quieren meter a nuestros hogares y que a revisar, cuando salgo por comida meten las manos en mi bolso, esto no es vida».

«Ahora en la Cota 905 se siente como en un penal, estamos como presos, revisan las cosas al salir de casa y al entrar; si vamos a visitar a un vecino nos preguntan el porqué estamos allí».

Más testimonios

«Un policía me preguntó si no iba a remodelar la puerta, y le respondí para que si igual me la van a volver a tumbar; prefiero dejar la madera abierta para que pasen directo».

 

«Saquean, maltratan, ofenden, rompen puertas», así reza un testimonio por redes sociales, donde aseguran que viven constantes abusos por funcionarios.

El coordinador de investigación de Provea, Marino Alvarado, detalló en exclusiva para Cima360News, que se han registrado allanamientos en estas zonas sin ninguna orden judicial convirtiéndose en una práctica de la intervención de los cuerpos policiales.

«Pareciera que esta normativa que está en la constitución y sobre la que explica que el hogar es inviolable; el gobierno lo ha eliminado para los sectores populares. Los funcionarios se sienten en el derecho de ingresar a cualquier vivienda y a cualquier hora, detienen, asesinan y roban todo lo que puedan».

También pulsó, que hay detenciones arbitrarias

«Ser joven en una zona popular cuando ingresan los policías es un riesgo, cualquiera que tiene más de 14 años está en peligro; allí hay ejecuciones de jóvenes».

Y por último considera como un tercer elemento grave es con la «nueva revolución judicial», personas de bajos recursos que viva en estas zonas  y tenga antecedentes policiales, tienen un altísimo riesgo de ser asesinadas.

«Muchas de las personas que están saliendo en libertad, y viven en barriadas están en riesgo tras operativos arbitrarios. Con el sólo hecho de tener antecedentes se les condena a la muerte».

Finalmente subraya que «Venezuela se ha convertido en un riesgo si vives en una zona popular».