¿Conoces el marketing astrológico? No, entonces te presentamos a Bruja Wicca
Lady Vargas, también conocida como Bruja Wicca, es la bruja y astróloga colombiana detrás de HKT; una escuela de magia digital que forma a más de 250 estudiantes. Allí, enseña a otros a convertirse en brujos, magos, chamanes y médiums.
Bruja Wicca @SoyLadyva se crió dentro de la religión católica, pero en su historia familiar, algunos de sus antepasados tenían vínculos con la brujería, el tarot y la curación. Esto fue importante para ella cuando era niña.
“Me crié dentro de la religión católica. Paradójicamente en el seno de mi linaje ancestral estaba la preexistencia de la brujería, una tía tarotista, mi abuela que había probado todas las Mancias y un bisabuelo que era el curandero empírico del pueblo”, Bruja Wicca comparte.
A la temprana edad de 7 años, Lady, Bruja Wicca tuvo su primera experiencia paranormal; y a partir de ahí todo cambió para ella. Luego a los 9 años pudo saber cuando un conocido iba a morir porque sintió un peculiar olor a jazmín y madera.
“A la edad de 7 años, tuve una experiencia paranormal. Una noche de noviembre, mientras jugaba con mi hermano, vi lo que por primera vez en mi vida llamaría el diablo. En realidad, ambos vimos a este ser y no fue la única experiencia. Años después, cuando tenía 9 años, era muy frecuente que oliera a madera y jazmín horas antes de que falleciera un conocido. A partir de ahí comencé a sacar conclusiones y me di cuenta de que sí podía ver al diablo; significaba que también podía ver a Dios”. Bruja Wicca explica.
Cuando tenía 11 años, Bruja Wicca expresó a sus padres su desacuerdo con la religión católica y su deseo de estudiar e investigar a fondo la verdad sobre Dios.
A la edad de 16 años, Bruja Wicca estaba incursionando en diferentes grupos y sectas donde se cuestionan todas las creencias y así comenzó su estudio informal de percepción extrasensorial (PES).
Hoy, Bruja Wicca dirige una escuela de magia llamada HKT, donde enseña a más de 250 personas los fundamentos para convertirse en brujas, magos, chamanes y médiums; según sus raíces ancestrales y sus talentos naturales.
“Diariamente realizo sesiones de decodificación y Tarot Egipcio con decenas de personas que me contactan para tomar decisiones importantes en sus vidas.” Ella agrega.
A fines de 2019, Bruja Wicca sintió una lucha interna entre la tecnología y la necesidad de contarle al mundo su historia. Una vez que comenzó a compartir su vida en las redes sociales, comenzó a recibir buena interacción e incluso cartas de sus seguidores agradeciendo porque ya no se sentían tan solos o raros.
“En otras palabras, mis seguidores habían encontrado su tribu. Fue entonces cuando empezamos a encontrarnos; brujas y magos de todo el mundo.” Bruja Wicca dice.
Bruja Wicca está convencida de que todo el mundo tiene un propósito. Después de ver lo que estaba pasando durante la pandemia y su determinación para que su hija no pasara por sufrimiento, se sintió motivada a unirse a esta industria y vivir de ella.
“Me motivó mi hija, y ver el poder de la gente, el monopolio de la información, el miedo colectivo, la desesperanza y muchas cosas más que me hicieron recordar la misión por la que vine aquí. No quiero ver a mi hija ni a nadie más alimentando el miedo y la injusticia porque al final la vida no es tan grave y si te mueres hoy, el mundo sigue. Todos vinieron con una misión única y auténtica que deben ejecutar”, resaltó Bruja Wicca.
En su camino, Bruja Wicca ha vivido diferentes circunstancias que han sido desafiantes. El obstáculo más difícil fueron los dos años de su vida en los que luchó contra la ansiedad.
“Mi ansiedad desató el pánico y el insomnio severo, pero gracias a ella el miedo se convirtió en mi amigo. Yo lo transmuté”, afirma Bruja Wicca, que asevera que se diferencia de otras personas psíquicas y astrólogas porque siempre es sincera. No tiene nada que ocultar y dirá lo que piense sobre el ocultismo y cualquier otra cosa que considere digna de expresar.
De cara al futuro, Bruja Wicca quiere digitalizar por completo su escuela de magia dejando solo una pequeña extensión física de la misma, que servirá solo para los magos consagrados. “Quiero llevar esta experiencia al metaverso donde estoy segura de que la gente la necesita ahora más que nunca. También quiero terminar de escribir mi libro antes de retirarme a las montañas”.