Chile nuevamente deporta a migrantes venezolanos
El Gobierno chileno nuevamente expulsó a migrantes venezolanos con su nueva política de deportaciones administrativas contra quienes hayan ingresado de manera irregular al país.
Esta vez expulsaron a un grupo de 56 venezolanos, a los que señalan de presuntamente incursos en casos de robos, tráfico de menores, drogas o ingresaron ilegalmente al país.
Con esta acción en lo que va de año el gobierno chileno ha deportado a unos 200 venezolanos y se espera que en lo que queda del año la cifra de expulsados supere los 1.500. Para su plan han dispuesto un presupuesto de unos $418.000 y han abierto licitaciones de empresas aéreas para 15 vuelos con los que se haría el traslado.
Los migrantes, sin haber tenido derecho a la defensa y a muchos de los cuales les separaron de sus familias, fueron enviados en un avión que partió a última hora del domingo de Santiago a Maiquetía.
Estas medidas administrativas han sido rechazadas por organizaciones de derechos humanos y por la iglesia católica chilena que advierten que se está estigmatizando a los venezolanos que sin recursos económicos huyen de la dictadura de Maduro y han llegado a Chile después de caminar 15 días atravesando múltiples riesgos por varios países.
Los obispos chilenos se han mostrado muy preocupados por las detenciones y expulsiones de los venezolanos, y piden al gobierno que se les permita tiempo razonable para el respectivo derecho a la defensa.
Justamente con este argumento, ya la justicia chilena ha obligado al gobierno de Sebastián Piñera a frenar casos de expulsiones de venezolanos.
En Chile hay cerca de 500.000 venezolanos que desde el año 2014 han llegado huyendo de la pobreza, la inseguridad y la opresión en Venezuela.
En la primera ola migratoria de venezolanos por América Latina, llegaron a Chile personas con un poder adquisitivo que les permitía instalarse tranquilamente y establecer negocios o ser contratados en empresas que necesitaban personal con el alto nivel de capacitación de ese grupo de venezolanos.
Ya con la segunda y tercera ola, cuando a Chile le comienza a incomodar los migrantes venezolanos, la situación ha pasado a ser distinta, porque la mayoría son personas que no tienen recursos económicos para instalar negocios en esa nación y muchos llegan en situación de necesidad extrema, solo buscado una oportunidad laboral en los oficios que los propios chilenos no quieren hacer, para así poder sobrevivir a la tragedia del chavismo.
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Información redactada por la Alianza informativa de Cima 360 News y The Latam Post.
