BriLife: la vacuna israelí que esta a punto de ser comercializada por el mundo

La pandemia por la COVID-19 ha cobrado más de 4,2 millones de vidas en el mundo y los contagios siguen en aumento. Es por ello, que los expertos no han descansado hasta conseguir una vacuna, realmente eficaz, que frene los casos y las muertes ya que las variantes del coronavirus se han vuelto muy agresivas, lo que ha colapsado los centros de salud en muchos países.

Israel sufrió un exponencial aumento de casos desde su primera oleada en febrero de 2020 y actualmente tiene una de las tasas de vacunación más alta de mundo contra COVID-19. Es por ello, que los especialistas israelí desarrollaron la vacuna BriLife para combatir el coronavirus

Vacuna israelí BriLife

El desarrollo de la vacuna BriLife esta a cargo del Instituto de Investigación Biológica (IIBR) el cual ha trabajado sin descanso para frenar la propagación del virus a causa del COVID-19. BriLife es una vacuna israelí basada en vectores, con una conveniente refrigeración de 2-8 grados centígrados lo que facilita el transporte y se espera que su costo sea menor que el de la vacuna Pfizer.

Esta vacuna es financiada por Israel y pasó por la fase 2 contando con más de 1.000 voluntarios y extensas pruebas de seguridad. Sin embargo, los elevados gastos que ha generado el desarrollo de esta vacuna ha sido foco de críticas públicas. Por ello, se creó el IIBR para proteger el desarrollo de la vacuna, pues operan bajo el manto del secretismo.

«Aparentemente, después de medio año, la eficacia de la vacuna sigue siendo alta, en contraste con la vacuna de Pfizer”, escribió N12.

Ensayo de la fase 3 de la vacuna BriLife

Los especialistas del Hospital Hadassah de Israel afirmaron que «el estudio de fase 3 se hará en Sudamérica, quizá en Argentina». El grupo de expertos hizo una conferencia llamada «Juntando esfuerzos para curar al mundo» realizada por Zoom, donde tuvieron cobertura periodistas de Israel, Brasil, Uruguay, Chile, Paraguay, México, Perú, Panamá y Argentina.

Yoram Weiss, director del Hospital Hadassah «explica una de las razones por las que viajamos a Argentina, porque aquí en Israel estamos llegando a la inmunidad de rebaño y para hacer el ensayo de fase 3 tenemos que encontrar países a los que les faltan vacunas».

Weiss también explicó que «Hadassah no sólo trabaja como Hospital, sino también con investigación y creamos una medicación y una vacuna que puede ser muy importante para la cura en Argentina y en todo el mundo».

Los expertos y especialistas coincidieron que la visita a Argentina ayudó a «compartir la experiencia» y a «aprender e intercambiar conocimiento», ya que Argentina «parece estar en la situación» que vivió Israel hace unos meses atrás.

Los expertos y especialistas coincidieron que la visita a Argentina ayudó a «compartir la experiencia»

El Hospital Hadassah está ubicado en Jerusalén y durante la pandemia y los meses críticos en Israel fue el que tuvo mayor número de pacientes de COVID-19. Así lo dijo Sigal Sviri, directora de la Unidad de Cuidados Intensivos de Covid-19 «Hace tres meses estábamos en un lugar terrible, teníamos uno de los índices más elevados de infección del mundo». 

COVID-19 en Israel

Israel desde el 27 de febrero de 2020 ha sufrido tres oleadas con un exponencial aumento de casos de COVID-19, lo que llevó al cierre total del país en abril de ese año con estrictas prohibiciones, por un período de 3 días. Los ciudadanos cumplieron con las exigencias establecidas, una de ellas fue no alejarse más de 100 metros de sus hogares, lo que disminuyó notoriamente los casos de contagio.

Pero, al reabrir la economía los casos volvieron a elevarse y las cifras de muertes eran cada vez más altas, lo que llevó a un segundo cierre total del país el 18 de septiembre de 2020. Las autoridades empezaron a establecer estrategias con el fin de frenar los contagios, pero los casos confirmados crecían en las localidades árabes. Estos altos índices llevaron a que Israel anunciara una campaña de vacunación el 19 de diciembre de 2020 con la vacuna aprobada Pfizer, pero no obtuvieron los resultados esperados ya que el número diario de los casos confirmados y de muertes siguió aumentando.

Por lo que, el 27 de diciembre de 2020 el gobierno impuso un tercer bloqueo incluyendo a más sectores y dentro de las estrategias estuvo el cierre del comercio, restricción en los lugares de trabajo y el funcionamiento parcial del sistema educativo. Sin embargo, a pesar de todos estos intentos para frenar los contagios por COVID-19 la tasa de mortalidad siguió en aumento.

Al empezar el 2021 el panorama cambió favorablemente, ya que en febrero el 34,98% de la población contaba con la primera dosis y el 20,26% había sido vacunada con la segunda dosis lo que llevó al cese notorio de casos diarios confirmados. Por lo que, se abrió la economía y aumentando la tasa de vacunación fue disminuyendo la tasa de mortalidad.