Bebé venezolano muere por disparo de la Guardia Costera de Trinidad y Tobago

Un niño venezolano murió luego de que la Guardia Costera de Trinidad y Tobago interceptara una lancha en la que viajaban migrantes venezolanos y abriera fuego contra ellos. El pequeño, de unos nueve meses de vida, viajaba en los brazos de su madre quien también resultó herida.

«Me mataron al muchachito y yo estoy tiroteada también», dice llorando su madre en uno de los audios que han circulado en redes sociales sobre la terrible tragedia.

El menor identificado como Yaelvis Santoyo Sarabia

y su madre Darielvis Sarabia eran parte de al menos 20 personas, entre ellas niños, que se embarcaron en Delta Amacuro, la noche de este sábado, rumbo a Trinidad. Migrantes que huían de la grave crisis que enfrenta Venezuela.

Disparos sin mediar palabras

En su trayecto, los balseros fueron interceptados por los funcionarios trinitarios, que habrían disparado contra la embarcación «sin mediar palabras», matando al bebé e hiriendo a la madre.

Comunicado de  la Guardia Costera

La Guardia Costera de Trinidad y Tobago ha dicho que habría actuado «en defensa propia» luego de la lancha que trasladaba a los migrantes de manera irregular «tratase de embestir» el bote de las autoridades y «temían por sus vidas».

Según detalla el comunicado,

la Guardia Costera habría hecho varias advertencias al bote con megáfono e incluso disparos al aire, pero por un presunto intento de ataque contra la embarcación trinitaria, los efectivos abrieron fuego contra «los motores» de la lancha donde viajaban los venezolanos.

“Se utilizaron todos los métodos disponibles, incluido el uso del megáfono, la bocina del barco, el reflector y las bengalas, para tratar de detener la embarcación sospechosa, sin embargo, la embarcación continuó intentando evadir TTS SCARBOROUGH. De acuerdo con los protocolos estándar, a continuación se emplearon disparos de advertencia delante de la embarcación”, reseñó el comunicado.

La guardia costera aseguró

que esta medida también resultó inútil. “En este momento, el bote del barco de TTS SCARBOROUGH intentó interceptar el barco, sin embargo, el barco continuó con maniobras agresivas, primero entró en contacto con el bote del barco y luego intentó embestirlo”, continuó el texto.

Asimismo, la Guardia Costera dijo que el barco de migrantes finalmente se detuvo “y solo entonces se descubrió que había inmigrantes ilegales a bordo que habían permanecido ocultos y, por lo tanto, no se los había visto antes.

Más controles descubrieron a una migrante ilegal adulta que sostenía a un bebé y que indicó que estaba sangrando”.

Según el comunicado, el barco migrante lo llevaron junto a TTS SCARBOROUGH y la mujer herida la trasladaron a un centro de salud.

La Guardia sabía que podía terminar en catástrofe

La guardia costera dijo que estaba familiarizada con “los resultados catastróficos que pueden ocurrir cuando se utiliza la embestida como técnica evasiva, ya que dos veces antes en el pasado reciente, los interceptores de la Guardia Costera han sido embestidos por embarcaciones sospechosas, lo que resultó en la pérdida total del interceptor.

Incidentes de alto riesgo

En ambos incidentes, las vidas de las tripulaciones del interceptor estuvieron en riesgo ya que escaparon por poco de lesiones graves y la muerte. En esta ocasión, el esfuerzo de embestida de la embarcación sospechosa, que era más grande que el bote del barco, hizo que su tripulación temiera por sus vidas y, en defensa propia, dispararon contra los motores de la embarcación sospechosa, en un intento de detenerlo”.